Seguidores

lunes, 30 de enero de 2012

Instante 46



Vale, lo gritaré lo más alto posible. Que te peten. Pero bien petado. Que te pongan en el corazón una diana y que te tiren dardos, a ver si así sientes algo. Que ese ego tan grande que tienes te explote de una puta vez. No, no puedes. No puedes venir aquí, subir las manos por mis piernas, y pensar que las voy a abrir. Ya vale. ¿No te cansas? Enserio, ¿no te cansas de decepcionarme tanto? Te gusta jugar, pero no que jueguen. Conmigo las cosas no van así. Si entras en mi cama una noche, tendrás que quedarte hasta que suene la alarma. Nada de irse a escondidas a ciertas horas de la madrugada. Si me pides un cigarro después de un orgasmo, no te lo negaré. Pero antes de que des la última calada quiero otros muchos revolcones.
Al final siempre soy yo la que pierde el culo por ti. La que utiliza la lengua para hacerte caricias en el cuello.
Me he cansado ya de noches en vela, esperando señales tuyas. De quedarme sentada en la cama, con la almohada en la cara, maldiciendo cada segundo en los que te regalé mi felicidad. Yo hoy con tus Te quiero me limpio el culo. Prometo que mañana no te llamaré. Ni mañana, ni pasado. Y yo si cumplo mis promesas.

1 comentario:

equilibristasincirco dijo...

buff que texto, se nota que esa persona te ha hecho daño y que por momentos sientes mucho desprecio hacia el, pero si eres fuerte todo se supera
te sigo!